La Evaluación Ético-Esteticista en el Aula Universitaria Durante un Curso. Tesis Maestría en Educación Superior, 2007 (64)
Dr. Luis Ignacio Hernández Iriberri.
“Espacio Geográfico”, Revista Electrónica
de Geografía Teórica.
http//:espacio-geografíco.over-blog.es/;
México, 31 mar 11.
Un hecho importante a destacar, fue el que las primeras clases, unas cuatro a seis entre los seis grupos manejados, fueron dedicadas a impartir el curso en sus resúmenes; un resumen general (dos sesiones), y la explicación particular de los temas concernientes a la primera de tres unidades (unas cuatro sesiones), sometiendo al estudiante al proceso de trabajo de acopio de datos y consulta de sus descripciones; de modo que toda esa filosofía educativa o teoría de la didáctica del curso que en la práctica se estaba llevando a cabo, no fue expuesta sino a mitad de camino rumbo a la primera evaluación parcial.
El dato resulta interesante, porque muestra cómo la explicación de la didáctica del curso no quedó en abstracto al inicio, sino que dicha explicación, luego de varias clases, fue ya a manera de generalización de una práctica dada, en la cual, en los hechos, había ya dejado en evidencia las virtudes del trabajo de cada cual. No obstante, a tiempo de rectificar para su primera evaluación, haciéndose ello al mismo tiempo muy notorio.
El resultado final del proceso: la desalienación real del trabajo concreto allí donde fue posible, en consecuencia, la formación de la personalidad en dirección del humanismo, se verificó en el trabajo cuasi discipular de un grupo reducido de estudiantes en cada curso. Cuasi discipular, ya no porque hubiese algo que perturbase la relación magisterio-discipular, sino en tanto que el trabajo verdadero o plenamente discipular, implica un proceso más largo y continuado incluso extraaula, todo lo cual quedó ya fuera de los márgenes temporales de este trabajo de investigación.
El desarrollo del pensamiento, del reflejo objetivo de la realidad objetiva en el ejercicio del lenguaje en sus diversas formas (oral, escrito, gráfico, e incluso no-verbal); el desarrollo del pensamiento aplicado en la adecuación del proceso de investigación previo al desarrollo de la hipótesis, e incluso la sensibilidad emocional (particularmente dada en el curso de “Desarrollo Humano” en el tema del estudio de la Estética); se ha establecido como base de la formación de la personalidad, esto es, de las cualidades intelectuales, axiológicas y de socialización; sin pretender ni esperar que el autoperfeccionamiento espiritual de la personalidad sea lo más importante y mucho menos lo único, frente a la necesidad primera de cambiar el mundo, es decir, de transformar primero nuestra sociedad, para que la efectiva realización de la personalidad humana sea.
La anterior Tabla de Concordancias (Fig.15), para la observación del período del primer semestre lectivo del año 2005, corroboró que las variables básicas: a) Afectividad, b) Disimulo, c) Evaluación a Confianza Plena, d) Evaluación Ético-Estética por Autocompromiso, y e) Matriz de Evaluación por Autocmpromiso Adecuada; sintetizan todo el proceso trágico y sublime a la vez, de la larga experiencia de una década de nuestra práctica docente que culmina exitosamente, más aun, coincidiendo justo el cumplimiento de la década, con la terminación de la Maestría en Educación, como queda sustentado en esta tesis. El resultado final esperado: “Bueno (institucionalmente)”, “Satisfactorio (Profesionalmente)”, ya no supuso ninguna condición relativa, simplemente fue así, en términos absolutos.