Nuevo Mundo: Concepto con el que se designa a las nuevas tierras descubiertas por Cristóbal Colón durante su tercer viaje, al tocar las costas de Paria en la desembocadura del río Orinoco. Con él no se está invocando, en ese momento, a la totalidad del nuevo continente aún desconocido como tal, sino a lo que Colón suponía ser nuevas tierras al sureste de Asia, más al oriente, incluso, de la Península de Cattigara misma. Suele ser argumento histórico, ciertamente débil, para atribuir a Colón el descubrimiento del nuevo continente, pues, en realidad, hasta su muerte, el Almirante de la Mar Océana, creyó estar en las costas de Asia; pues todavía en su cuarto viaje, obstinadamente buscó el Paso del Sur o Estrecho de Basmán (Estrecho de Malaca), pretendiendo el primer periplo a la esfera terrestre.
La sola introducción de la idea de la existencia de un Nuevo Mundo, hizo pasar a la historia el concepto del “Orbis Terrarum”, como idea teologal (es decir, que atribuye virtudes divinas), no sólo de la única porción continental existente, sino incluso como idea de la única tierra habitada.
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